MEMORIES
They say memories are golden
Well maybe that's true
But we never wanted memories
We only wanted you.
A million times we've needed you
A million times we've cried
If love alone could have saved you
You never would have died.
In life we loved you dearly
In death we love you still
In our hearts you hold a special place
No one could ever fill.
If tears could build a staircase
And heartache build a lane
We'd walk the path to heaven
And bring you back again.
Our family chain is broken
And nothing seems the same
But as God calls us one by one
The chain will link again.
Author Unknown
LOS OJOS DE 'TATO' TE ESTAN MIRANDO
A María del Carmen
Negros, azules; bellos recordados.
¡Cuántas veces brillar vieron la aurora!
En el negro sepulcro están dormidos;
Mas, siempre al Nuevo Sol están abiertos.
Amorosas las noches, más que el día
a cuántos ojos habrán embelesado...
Cual luceros fulguran todavía
tus ojos que de sombras se cuajaron.
Ese su vívido mirar ¿están ya yertos?
¿Apagada su luz para tu madre?
A otro Cielo tus ojos se han abierto:
A la eterna e invisible Luz.
Las estrellas se opacan, mas al paso
brillan en otro mundo que no se trunca;
tus pupilas se apagaron en ocaso,
pero sin morir ni opacarse nunca.
Negros o azules, bellos y queridos;
tus ojos por aquel Sol están heridos;
a pesar que se durmieron en la tumba,
fúlgidos y piadosos esa belleza miran.
Porque en tus ojos, que ya no tienen lágrimas,
el dolor divino de tu madre
encendió el fanal de la Esperanza.
Jorge Isaac Cazorla
QUETITA
Rosa de otoño divinal y pura
exalando pétalos delicados,
domeñas mis sueños encumbrados
deshojando tu espléndida hermosura.
Destilan tu ojos de zafir, dulzura;
ambrosía en tus labios encarnados;
y el amor en latidos perfumados,
a Jesús el afán de tu ternura.
Mi orfandad se encumbró de orgullo
al sentirte estrella toda mía,
en la angélica luz de tus auroras.
Junto a tí, mi pasión y tu arrullo,
con ansias de Dios en cada día,
las corolas prendieron de tres flores.
Jorge Isaac Cazorla
DESPEDIDA
Buenas noches, mi Dios. Hasta mañana.
Voy a ensayar mi muerte una vez más.
Pero Tú no te quedes en la playa,
que a bordo de mi sueño
conmigo va tu corazón marino.
Buenas noches, mi Dios, hasta mañana,
por unas pocas horas
me embarco hacia el alta nada y olvido.
No es que no ame tu vida y tu planeta,
pero amo más tu muerte y tus estrellas vivas.
¡Si esta unánime noche de presagios
fuera por fin mi noche,
y encontráse en su busca para siempre
mi ancla la ondura de tu corazón!
Buenas noches mi Dios, hasta mañana.
Como en un blanco mar,
mi marca va en luz de tu mirada
hacia doradas islas cenicientas
de bruma y de imposible.
Antes de irme al olvido, Padre Mío,
inclina la cabeza, y en tu frente
prenderé mi amargo beso humano.
Padre mío, en voz baja te pediré un juguete,
el que jamás tuve en mi pobreza:
haz que esta noche mi barquilla triste
se pierda y amanezca para siempre
en la playa de luz de tu costado.
Entre las algas muertas de mi orilla
he dejado, Señor, mi cofre abierto
y el adorado rostro de mi amor,
para marchar a tu encuentro en línea recta
sin abrigo de curvas florecidas.
Y es muy honda, Señor, la quemadura
de tu ausencia. Esta noche
tendida dejaré toda mi red.
La estrella matutina
¿alumbrará tu rostro entre mis manos?
Buenas noches, mi Dios, ¿hasta mañana?
Jorge Isaac Cazorla
POETRY / POEMAS